lunes, junio 19, 2006

Cumpler de Amparo

El sábado me levanté a las 9 de la mañana ya que volvía a dar clases a Alicia en Húmera. Se puso tan contenta cuando recibió su primer mail y le encantó el típico power point de frases raras, imágenes bonitas y música de los Beatles tocada con flautas andinas y ese rollo... Me dijo que el sábado siguiente me llevara el bañador y a lo mejor lo hago y todo...
Después de eso, sobre la 13 pasé por casa a dejar el coche y me fui a la gamba is gut con Juan y Raquel. La tomamos hasta que cerraron, hablando de la Canción de Hielo y Fuego tb, que se lo acababa de terminar y tb le moló musho, luego a los torreznos a comer un pojo, y luego terminamos mocazos con Erdinger y salchichota blanca en el Seny. Gané inexplicablemente en Hatrrick, mi segunda victoria de la temporada, mis chicos están crecidos... A ver si me salvo y no bajo a 6ª otra vez...
Luego Juan y Raquel se largaron y yo me fui a Juan Bravo todo moco a ver el Rep. Checa - Ghana, peor me zampé 2 donuts y me quedé dormido a ratos... Luego me fui a casa a ducharme y volví a JB a ver el Italia - EEUU, con mi primo Chus, Juan, el Pollo, la Gurdel, mis tios, todo cristo estaba presente... vimos la primera parte y luego la simpática y yo nos fuimos al metro Acacias donde habíamos quedado con la Gran Ainhoa para el cumpler de Amparo. Lo celebró en un garito llamado la Concha, mu raro, con birritas, raciones, tarta y demás, solo que estabamos los 3 llenos y no comimos ninguno nada, solo bebimos, 4 o 5 birras y para terminar un mojito de buen rollo que nos dejó con el puntillo ya... En ese tiempo, hicimos el rancio como sólo los Barrasa (y la raspa de Ainhoa) sabemos, y no nos presentamos a naide, pero ocurrió algo muy grasioso con una chica. Resulta que yo bebía clara, Ainhoa clara con limón, y la simpática bebía birras a pelo. Entonces una chica del cumpler hizo de camarera improvisada y nos preguntó, ofreciendonos una cerveza:
Chica rubia: Cerveza?
Ainhoa: No, yo clara.
Chica rubia descojonada: Ah, encantada, yo María Jesús (o algo así, no me recueldo con claridad...)
El caso es que estuvo grasioso en su momento...
Luego Amparo se largó y nos enseñó el cachorro de cocker que tiene y decidimos pillar un taxi a eso de la 1 y algo al Kathmandú para que lo conociera la Simona, ya que a Ainhoa le moló musho ese sitio, que fue donde terminamos en la despedida de José Diego. Allí nos tomamos una copa, estas dos hicieron el amago de bailar, y nos largamos. Tras esperar 1 hora un taxi, decidimos andar hasta Gran Vía para que Ainhoa se cogiera un búho a Moncloa a ver si allí había más suerte... Nosotros intentamos recorrer la línea verde del Búhometro pero sin resultados, así que acabamos andando a casa miserablemente. Palizón de andar...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo mejor de la noche, lo buenísima anfitriona que es la Amparella. No pasaban más de 2 segundos entre caña vacía y caña llena (bueno, en mi caso, clarita:-). Y ese cachorrito... que nos dio la vida y las ganas de seguir creyendo en la especie humana durante unas horas. JAPI BERDEI TU YÚ!!!!

Anónimo dijo...

Muy cierto, Clarita, tienes toda la razón jiji. Taaan atenta Amparo, estuvimos muy bien cuidados, pero muy rebién... lástima estar tan llenos que no pudimos retornar a la infancia hincándole el diente a esos brazos de gitano que se marcó, jijii. Lo de la odisea para volver, en fin..., si no fuera porque estoy bien entrenada... ahora tendría dos callos gigantes por pies...
besijos